La calidad del echado es primordial para una vaca, para su bienestar y su producción de leche. Cuando está echada, el flujo sanguíneo mamario aumenta de un 25 a un 50 %. Para dar a sus animales todas las oportunidades de producir bien, es necesario proporcionarles plazas de echado en cantidad suficiente, adaptadas a los mayores tamaños del rebaño, sea cual sea su posición favorita al echarse, con elementos cómodos e higiénicos.
Con esta idea en mente, Bioret, especialista en equipos ganaderos, ha desarrollado el colchón Aquastar para complementar una cubículo. Sobre una subcapa de látex de 35 mm de espesor, se apoya una bolsa de agua de 70 mm, para que cada vaca pueda encontrar su posición de echado, sea cual sea su morfología, a la vez que disfruta de una presión homogénea en la totalidad de su cuerpo.
La circulación sanguínea de la vaca mejora así, lo que favorece su producción de leche. Estudios independientes han demostrado que, gracias a los colchones Aquastar, en comparación con una cama clásica, los ciclos de echado de los animales eran más largos, lo que aumentaba la producción de 1 a 3,5 litros de leche al día.
Además, para mayor comodidad, el acabado de piel de melocotón de la superficie del colchón protege las patas de los bovinos de la abrasión al disminuir la fricción.
La solución refrescante en caso de temperatura elevada
Como la bolsa de agua crea una pendiente hacia atrás, se favorece el flujo natural de los líquidos. Por lo tanto, se facilita la limpieza de la superficie del colchón y basta con añadir diariamente 300 g de paja picada para mantener limpio el cubículo.
Vacas alojadas en un entorno sano, a las que se evitan las lesiones, pero también los golpes de calor. De hecho, la bolsa de agua también asegura un intercambio térmico que disminuye el estrés térmico de los animales en período estival. « Ya no hay vacas echadas en el pasillo, incluso cuando hace calor», confirma David Forget, ganadero de Loira Atlántico, cuyo establo de cubículos está equipado con colchones Aquastar desde hace algunos años.
Este objetivo, el de proporcionar a las vacas de su rebaño la mejor comodidad al tumbarse, es lo que impulsó a Hugo Lucas, ganadero de Côtes d’Armor, a instalar colchones de agua Aquastar en los cubículos durante la construcción de un nuevo establo en 2020. « Las vacas parecen apreciarlo», estima el joven ganadero, que presenta como prueba la ausencia de escaras desde que los cubículos están equipados con colchones Aquastar.
« Si invertimos en su bienestar y su comodidad, las vacas se lo agradecen, subraya Hugo Lucas. Sin cambiar su alimentación, hemos ganado de 2 a 3 kilos de leche por vaca al ponerlas en buenas condiciones en nuestro nuevo establo.» Unas vacas en plena forma y productivas son la prueba de que el ganadero ha tomado las decisiones correctas en materia de cama al apostar por su comodidad de echado.
