Las alfombrillas de goma evitan resbalones y lesiones
Para cualquier ganadero, es la peor manera de empezar el día: entrar en su establo y encontrarse con una vaca que se ha resbalado y no puede levantarse. En el hormigón húmedo, a menudo pulido por los rascadores, el suelo puede volverse resbaladizo. Cuando una vaca se sube a horcajadas a un establo, se ve sorprendida por el rascador y resbala. El tiempo que tienen que esperar en el suelo antes de ser rescatadas y la gravedad de sus heridas hacen que muchas nunca se recuperen.
Vacas en pie
La colocación de alfombras de goma reduce considerablemente el riesgo de resbalar. La superficie antideslizante reproduce la suavidad y estabilidad de un prado. Las alfombras anti deslizantes hacen que los desplazamientos sean más seguros. Las vacas se moverán más para comer y beber, lo que favorecerá su producción de leche. Los dibujos de las alfombrillas de goma hacen que la superficie sea antideslizante, lo que mejora la seguridad de los animales. Incluso sobre una superficie mojada, se reduce el riesgo de caídas, incluso en caso de empujones.
Fue un problema recurrente de resbalones y caídas de las vacas lo que llevó a Christophe Favreau, ganadero de la región francesa de Deux-Sèvres, a instalar las esteras Magellan. "Desde entonces, no he vuelto a tener problemas de resbalones y caídas", afirma. El mismo planteamiento adoptó Gaec des 4 lieux, en Vendée. "Nuestras viejas alfombras tenían 12 años y se habían vuelto resbaladizas. Desde que las sustituimos por alfombras Magellan en todos los pasillos raspados, las vacas vuelven a estar en pie. Corren sobre ellas como si estuvieran en el prado", afirma Damien Soulard, uno de los socios. Hace poco, una vaca hizo un splits pero, gracias a la estructura y los surcos, consiguió volver a levantarse sin ningún daño.
Otra ventaja de esta estabilidad es que, sin miedo a resbalar, las vacas podrán expresar mejor su comportamiento natural, como la entrada en celo. Con solapamientos más frecuentes, será más fácil detectar a las vacas en celo y, por tanto, inseminarlas en el momento adecuado. La expresión del comportamiento natural es uno de los criterios del bienestar animal. Una señal de que sus vacas se sienten seguras es que se atrevan a levantar una pata para lamerse.
Cuando el bienestar de los animales se une a la seguridad en el lugar de trabajo
La estabilidad que proporcionan las alfombras de goma es también una garantía de seguridad para los criadores. También es más cómodo para nosotros", bromea Damien Soulard. Incluso con las botas mojadas, ya no corremos el riesgo de resbalar y lesionarnos".